Algo tan cotidiano y necesario como son los folios en cualquier oficina y en la mayoría de las casas con ordenador, a veces pasa inadvertido. Es algo que está ahí y en lo que nadie se detiene demasiado hasta que hace falta.
En ese momento es en el que nos damos cuenta de la variedad de gramajes, acabados y hasta colores que existe en el mercado. Existe una gama tan amplia que desde DisOfic hemos planteado crear esa Guía de Compra de Folios y Papel de Impresora para ayudar al comprador a orientarse y encontrar exactamente el papel que mejor se adapta a sus necesidades.
No es lo mismo comprar folios baratos para imprimir documentación interna, tomar apuntes o que pinten los niños, a buscar un papel de calidad para hacer una presentación a un cliente.
Para hacer este documento más cómodo y ágil a la hora de la consulta, vamos a plantear varias subdivisiones en función de las características de cada uno de los productos.
- Gramajes
- Tamaños
- Colores
- Acabados
- Resolución máxima
Gramaje
Cuando nos referimos al gramaje del papel, en realidad hablamos del peso por metro cuadrado, es decir: al comprar folios de 80 gramos (los más habituales), cada unidad pesará aproximadamente 5 gramos.
Es importante tener en cuenta el uso que vamos a hacer del papel a la hora de pensar en el gramaje necesario. Por poner un ejemplo de lo que hablamos, podemos decir que el papel de fumar es de aproximadamente 25gr/m2, mientras que el fotográfico llega hasta los 250gr/m2.
Folios de 60 gr/m2
No son los más recomendables para imprimir en fotocopiadoras o impresoras domésticas ya que, tienen una densidad tan baja, que hace que tiendan a atascarse. Además la inyección de tinta hace que el papel tenga una excesiva ganancia de punto y tienda a “emborronarse”, cosa que también ocurre al usar rotuladores o plumas. Sin embargo son apropiados para tomar notas a bolígrafo o lápiz y son económicos.
Folios de 70 gr/m2
Con este gramaje tenemos el mínimo recomendable para el uso en impresoras (preferiblemente en blanco y negro), sin embargo la densidad hace que no transmita la calidad suficiente. Además sigue teniendo el mismo problema que el de 60gr/m2 a la hora de utilizar mucha carga de tinta.
Folios de 80 gr/m2
El estándar, lo más clásico que se suele encontrar en cualquier oficina. El equilibrio calidad-precio suele ser lo que hace que nos decantemos por este tipo de papel. Tienen buenas prestaciones a la hora de imprimir y no son excesivamente transparentes. Digamos que es el folio normal para el uso medio.
Folios de 90 gr/m2
Mejor calidad, la textura del papel es más solida y no transparentan prácticamente. Siguen funcionando extraordinariamente bien para la impresión, pero siempre requieren de una mayor inversión. Son recomendables si se buscan documentos con una mayor presencia, aunque tal vez no para el uso diario.
Tamaños
El formato estándar en la medida del papel es el llamado DIN, fijado por el Instituto Alemán de Normalización en 1922 que, posteriormente, fue la base para el equivalente internacional ISO 126.
Por lo general, los folios A4, son los que tenemos en la cabeza cuando pensamos en el papel estándar. Su medida es de 210×297, pero aunque no es muy precisa esta denominación, la de DINA4, ya que también se encuentran folios A3, A5, A6… con medidas que van hasta el A0 (de un metro cuadrado), el estandar comercial iguala los folios a los A4
Colores
Esto también es bastante peculiar. Por lo general, para el uso habitual del papel necesitamos de un color blanco o de un color relativamente claro con el fin de facilitar la lectura. Sin embargo, para ciertos usos puede ser interesante el utilizar folios de colores. Por ejemplo, siempre que queramos un fondo liso de un color concreto, mejor usar un papel que ya tenga ese tono a hacer una impresión de una masa de color tan grande (al final esto consumiría mucho tinta y el papel quedaría “húmedo”)
El uso es muy variado, desde manualidades a un uso más orientado a la empresa. Rojos, verdes, amarillos… podemos encontrarlos en muchísimas gamas e, incluso, comprar paquetes de folios de colores variados.
Al igual que en el caso de los folios blancos, los folios de colores también los fabrican en diferentes gramajes, con las características que ya comentábamos anteriormente.
Acabados
Hasta el momento tenemos claro que podemos encontrar papel de diferentes densidades, formatos y tonos. Aún así existe otro factor a tener en cuenta a la hora de tomar la decisión de comprar unos u otros: los acabados. No es necesario ceñirse siempre al clásico papel que se emplea habitualmente, sin brillo y más o menos traslucido como comentábamos en el apartado de gramajes.
Folios satinados
Se trata de un papel que tiene un gramaje generalmente mayor que el papel de impresora habitual (aproximadamente unos 120 gr/m2). El acabado presenta cierto brillo lo que hace que las imágenes ganen mucho en colorido.
Son recomendables para cualquier trabajo que requiera un acabado profesional.
Papel fotográfico
El acabado suele ser satinado, sin embargo también lo podemos encontrar mate. La principal característica es lo elevado de su densidad que oscila entre los 200 gr/m2 y los 350 gr/m2 (al menos de forma general), además el tratamiento que recibe hace que este tipo de papel sea óptimo para los trabajos con imágenes.
Folios reciclados
Si tienes conciencia ecológica y te preocupas por el medio ambiente, tal vez no te importe hacer un pequeño esfuerzo y pagar algo más por un papel que se produce recuperando celulosa de la empleada en otros usos. Para eso están los folios reciclados.
Resolución máxima
Por lo general no se suele contemplar demasiado esta característica del papel, pero es realmente importante tenerlo en cuenta, especialmente cuando se trata de impresiones en calidad fotográfica.
Hablamos de la cantidad de DPI o PPP (puntos por pulgada), una medida de resoluciones de impresión que hacer referencia a la cantidad de puntos de tinta que una impresora es capaz de producir en el espacio de una pulgada lineal. Cuanto mayor sea la resolución que puede alcanzar la impresora, mayor debe ser la resolución máxima que admite un papel, al menos si lo que queremos es aprovechar todo el potencial y calidad de impresión.
¿Te ayudamos a comprar folios?
Confiamos en que con toda esta información, tengas mucho más clara tu elección a la hora de comprar folios o papel para tu impresora. Una vez que tengas claro el tipo que más se ajusta a tus necesidades, sólo resta el seleccionar la cantidad que necesitas.
Ten en cuenta que los formatos más comunes como los DIN A4 de 80 gramos se comercializan en paquetes de 500 unidades, mientras que otros formatos y gramajes como pueden ser los papeles fotográficos, se suelen comprar en cantidades mucho más reducidas (20 o 50 unidades).